Entre todos los aspectos turísticos y de interés que podemos encontrar dentro del territorio de Birmania y que solemos destacar en este mismo sitio, uno de los principales tiene que ver sobre todo con los bosques locales. En ellos, de hecho, podemos encontrar una enorme cantidad de especies de árboles, y aunque algunos se mantienen casi vírgenes, en otros la situación resulta muy distinta.
El problema es que en Birmania, como en cualquier otra parte del mundo, nunca faltan las personas que quieren sacar provecho personal de la naturaleza, y aquí se ha hecho costumbre que algunos de los mejores bosques del mundo, como los locales, sean devastados directamente por quienes en realidad tendrían que cuidarlos, y para colmo las autoridades no hacen absolutamente nada al respecto.
Como los medios locales suelen decir al respecto, el “apetito insaciable de estos grupos por las maderas preciosas” es el que está provocando que bosques enteros hayan desaparecido de los mapas turísticos de Birmana, con las terribles consecuencias climáticas que ello significa, como de hecho habíamos mencionado también en las últimas horas.
En muchos casos, como para tomar conciencia de la gravedad de la situación, nos encontramos con que son los propios habitantes de Rangún, quienes terminan de limpiar los despojos que dejan las empresas madereras en las inmediaciones de los parques naturales o centros comerciales que recorren todos los días. Una situación que, esperemos, sea solucionada cuanto antes en Birmania.