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Hace algunas semanas hablábamos de las inversiones que China viene realizando en países como Birmania, y sobre todo, a la hora de analizar novedades como el gasoducto recién instalado en este país, que desató una enorme polémica por la forma en la que se gestionará un recurso natural básico como es el gas local.

El caso es que, pasado un buen tiempo, comenzó ya su funcionamiento este gasoducto, como lo informó una de las petroleras estatales chinas que participa en el proyecto. De esta forma, estamos en presencia de una espectacular obra de casi 800 kilómetros de longitud, que se encarga de conectar la costa del estado birmano de Arakan con la provincia sureña china de Yunnan, llevando gas claro está.

Pero eso no es todo, sino que se espera también que el año que viene comience a funcionar un oleoducto de unos 771 kilómetros cuya construcción terminará antes de diciembre, y que permitiría a China seguir alejándose como el principal socio comercial de Birmania, situación que comenzó hace tiempo de forma bilateral para ambas naciones.

De todos modos, y como para evitar polémicas y suspicacias, los chinos se han encargado de manifestar que buena parte del gas obtenido, aproximadamente el 20%, será descargado directamente en territorio de Birmania, de forma que los residentes locales de esa zona puedan beneficiarse igualmente.

Vía e imagen: Noticieros Televisa

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