El conflicto existente en la actualidad entre budistas y musulmanes en Birmania se torna cada vez más grave, sobre todo si tenemos en cuenta las quejas y la persecución que los segundos sufren por parte de los primeros, al punto de que en una de las principales ciudades locales se les quiere prohibir tener más de dos hijos.

El caso es que si bien todo comenzó como un rumor, el ministro de Inmigración de Birmania, Khin Yi, se ha manifestado a favor en las últimas horas, de la decisión de las autoridades del estado de la localidad de Rajine, de limitar a dos el número de hijos que pueden tener las parejas musulmanas, lo que les equipararía con los budistas, que tienen un crecimiento demográfico mucho más lento.

Como cada una de las medidas que toma el Gobierno birmano, además, ésta perjudica directamente a los musulmanes de la etnia rohingya, que de hecho se encuentran prácticamente fuera de cualquier legislación y protección del Estado, aunque por otro lado tienen que cumplir con obligaciones que sólo les tocan a ellos.

“La mayoría de las mujeres bengalíes son muy pobres. Tienen muchos hijos, en algunas zonas hasta diez. Eso no hace muy fácil el cuidado de los niños, por lo que la política de dos o tres hijos está bien, desde mi punto de vista”, señaló este ministro, el primero que se manifiesta públicamente al respecto de una medida que podría entrar en vigencia en breve.

Vía: Info Católica
Imagen: Asian Correspondent