La seductora Birmania, cuyo nombre oficial es “Unión de Myanmar”, es uno de los países más interesantes y recomendables de visitar del sudeste asiático, ya que posee un paisaje prácticamente verde en su totalidad con enormes extensiones de arrozal de lo que queda de las antiquísimas selvas, las cuales producen una sensación placentera y difícil de olvidar.
Cerca de las zonas costeras, el clima resulta más húmedo y fresco comparado al del resto del país. Para quienes opten por este exótico lugar de paisajes y climas múltiples, se recomienda como mejor momento para visitar el país entre noviembre y febrero, época cuando la lluvia y el calor son menores. Aunque para los que opten por visitarla en la temporada baja, pueden hacerlo durante los meses de mayo, junio y septiembre.
Entre los lugares que valen la pena visitar se encuentra “La Colina de Mandalay”. Este paradisíaco lugar ofrece una puesta de sol maravillosa que convierte en inolvidable la visita a Birmania. En el espectacular atardecer, es posible deleitarse de la caída del sol entre las montañas donde sus últimos rayos parecen despedirse como centellas de oro que se extienden a lo largo de la inmensa Colina; iluminando la estatua de Buda que allí se encuentra.
La llegada a la cima de la Colina no supone demasiado esfuerzo físico, ya que este se compensa con los atractivos paisajes cálidos que otorgan las cabañas y casas de los habitantes de la zona, disfrutando también de los aromas que dispersa la humedad de la verde y abundante flora de la Colina.
Imagen: Viajeros