El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Ramin Mehmanparast, expresó la profunda preocupación de su país por la matanza de musulmanes en Myanmar (Birmania), al tiempo que hizo un llamado para que cese la violencia en este país del sureste asiático.
«Esperamos que el gobierno de Myanmar prepare el terreno para la solidaridad, la unidad nacional y el respeto de los derechos de los musulmanes en el país, haciendo un alto a la violencia y evitando una catástrofe humana», dijo Mehmanparast.
Igualmente, exhortó a auqe sean adoptadas medidas humanitarias por parte del Gobierno de Myanmar, la comunidad internacional y la Organización de Cooperación Islámica (OCI), pues consideró fundamental aclarar los aspectos de los incidentes almentables.
Recordó, además, que “el respeto de los derechos de los militantes de diferentes religiones y preparar el terreno para que las minorías religiosas y étnicas puedan disfrutar de sus derechos civiles, son principios aceptados por todas las escuelas de pensamientos”.
Citó informes recientes que revelan la “situación de desastre” en la que viven los musulmanes de Myanmar. Desde junio, cientos de miembros de la minoría rohingya -formada por casi un millón de musulmanes- han sido asesinados, mientras decenas de miles de personas han sido desplazados, a causa de la ola de violencia.
El pasado tres de junio, 10 musulmanes murieron cuando una turba de un grupo étnico, conocido como el rakhines, en su mayoría budista, atacó un autobús de pasajeros en el estado occidental de Rakhine, limítrofe con Bangladesh.
De acuerdo a fuentes de la agencia iranía Press TV, entre el 10 y el 28 de junio, al menos 650 musulmanes rohingya murieron, otros mil 200 desaparecieron y más de 80 mil fueron desplazados como resultado de los disturbios, incendios, y un ciclo de ataques de venganza religiosa.
Vía: Tele sur tv
Imagen: Tele Sur tv